La inversión más importante que ha realizado el Estado panameño para la conservación de sus sitios históricos en los últimos años es el proyecto Preservación del Patrimonio Histórico de la Ciudad de Panamá, cuyo principal objetivo ha sido la reubicación de la vía Cincuentenario, que antes atravesaba el sitio arqueológico de Panamá Viejo.
Con un coste de 175 millones de dólares, el proyecto también incluye una serie de trabajos para mejorar las condiciones generales del Casco Antiguo, que junto al parque arqueológico integra un conjunto monumental declarado Patrimonio de la Humanidad por la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco, por sus siglas en inglés).
Los dos lugares están ligados históricamente: en 1519 se fundó la primera ciudad europea del Pacífico en lo que hoy se conoce como Panamá Viejo, aunque en 1671 sufrió un ataque pirata que la destruyó; dos años después fue reconstruida a unos kilómetros de distancia, en el actual Casco Antiguo. Las dos ciudades se encuentran separadas por numerosos barrios edificados en el siglo XX, y unidas por un eje de comunicación vial que abarca el Corredor Sur (un puente marino que pasa frente a las ruinas de Panamá Viejo) y la primera y segunda fases de la Cinta Costera, un parque lineal con vialidades.
"La reubicación de la vía Cincuentenario ha sido un gran legado de esta generación, pues solo ahora el sitio tiene la configuración de un parque arqueológico. Esto nos permite una mejor lectura y una interpretación integral de los valores patrimoniales del sitio. Además, y esto es algo muy importante, el parque tiene una ubicación privilegiada que facilita la promoción del valor intrínseco del Patrimonio Histórico entre la ciudadanía y los turistas", asegura María Eugenia Herrera, directora del Instituto Nacional de Cultura.
La obra para el nuevo tramo de la carretera, de poco menos de tres kilómetros, también ha dado lugar a nuevas investigaciones arqueológicas.
La titular de la Dirección Nacional de Patrimonio Histórico (DNPH) del INAC, Sandra Cerrud, explica que se solicitó al contratista realizar prospecciones arqueológicas y rescatar los hallazgos como un requisito para la construcción. Estos rescates incluyeron la documentación detallada y la entrega de las piezas a la DNPH.
Tras la reubicación de la vía, el paisaje del sitio arqueológico deja ver con claridad que se trató de una ciudad de cierta importancia, con una catedral y numerosos edificios con paredes de calicanto, pisos de canto rodado, pozos y aljibes.
"A raíz de la declaratoria de Patrimonio Mundial, en 1997, la Unesco solicitó a Panamá la reubicación de la vía. Finalmente, en esta Administración se logró este importante hecho", narra Raúl Castro, subdirector del INAC y representante de la entidad en el Patronato Panamá Viejo, que, desde su creación en 1995, administra el sitio.
Los miembros del Patronato Panamá Viejo, que anhelaban la reubicación de la vía, hoy se muestran llenos de entusiasmo por desarrollar proyectos ampliamente estudiados. "Con el cambio de la vía Cincuentenario se podrá transformar Panamá Viejo en un Parque Arqueológico e Histórico, abierto al público, con facilidades para su recorrido y disfrute; es decir, se va a ganar un espacio público con un valor patrimonial, cultural y natural", según Julieta de Arango, directora ejecutiva del patronato.
La organización también tiene un proyecto para la Recuperación de la Plaza Mayor de Panamá Viejo. En esta zona se construirá un museo infantil interactivo y una edificación que recreará una casa colonial.
"Estamos creando un jardín que permita interpretar los espacios verdes en el sector de Puente del Rey y próximamente se iniciará el retiro del asfalto de la vieja avenida Cincuentenario y la recuperación tanto del trazado urbano de la ciudad colonial como de los espacios verdes", agrega De Arango.
Aunque la consolidación de Panamá Viejo como un parque arqueológico es la iniciativa más destacada en materia de recuperación de monumentos históricos, hay que destacar que también se están desarrollando trabajos en el Casco Antiguo, que también son parte del proyecto Preservación del Patrimonio Histórico de la Ciudad de Panamá.
El enfoque principal de estos trabajos, que culminarán a principios de 2014, es sustituir infraestructuras obsoletas y colapsadas de agua potable, alcantarillado y drenaje pluvial, así como colocar un adoquinado nuevo en las calles y construir un estacionamiento para desahogar el congestionamiento en el interior del casco. También incluye el soterramiento de cables eléctricos y de comunicaciones que aún se pueden observar adosados improvisadamente a las viejas paredes del Casco Antiguo.
Por esta zona histórica circulan diariamente cientos de turistas y visitantes, que ya pueden apreciar las nuevas luminarias que se están colocando acorde a la arquitectura de la zona, además de la reparación de aceras en mal estado y adoquinado de las calles.
Cerrud considera que los trabajos que se están realizando tienen un impacto positivo que va más allá de las obra de ingeniería: "Este proyecto está incentivando a los propietarios de inmuebles a restaurarlos, porque se dan cuenta de que el barrio se está adecuando a la vida moderna, pero conservando su valor histórico".
Aclara también que existe una gama de incentivos legales y fiscales para que los propietarios acometan restauraciones en sus edificios.
"El Informe de Estado de Conservación, presentado en 2013, muestra que el 72,1% de los 523 edificios ubicados dentro del Casco Antiguo se encuentran en buen estado, una mejora significativa en comparación con las condiciones en el momento de su inscripción en la Lista del Patrimonio Mundial", continúa Cerrud.
María Fernández, una turista sevillana que visitaba recientemente el Casco Antiguo de Panamá, cuenta que encontró escenas que superan lo que había visto en fotos. "Es un país muy rico en historia y paisajes culturales, y están haciendo un trabajo maravilloso en el Casco Antiguo", asegura.
En el litoral de la bahía de Panamá se está desarrollando un proyecto vial y urbanístico que responde a los planes de desarrollo de la ciudad planteados en las últimas dos décadas. Así lo han afirmado en diversas ocasiones los representantes del Ministerio de Obras Públicas.
La obra dio comienzo en 2007, y ya están abiertas al público las dos primeras etapas y parte de la tercera, que sigue en construcción.
Las autoridades del MOP también han explicado a la prensa local que la Cinta Costera es parte de un eje de circunvalación de la ciudad. La zona sur de este eje va desde el Puente de las Américas (que une a la capital con el área oeste del país) por toda la costa hasta el aeropuerto. El eje tiene un segmento denominado Corredor Norte, que completa el circuito.
Un tramo de algo menos de tres kilómetros de la Cinta Costera está compuesto por un viaducto marino que rodea el Casco Antiguo a más de 250 metros de distancia y contará con una zona para vehículos automotores y otra para peatones y ciclistas.
En la más reciente reunión del Comité de Patrimonio Mundial, realizada en Camboya, del 17 al 27 del pasado junio, esta obra suscitó el debate: algunos expertos opinaban que el viaducto tiene un impacto visual sobre el casco, pero la mayoría aseguraba que las vistas desde el sitio histórico hacia el mar no han sido consideradas como un atributo que transmita el Valor Universal Excepcional del sitio; en todo caso, señalan algunos expertos, el impacto será positivo, ya que la obra crea la oportunidad de apreciar el conjunto arquitectónico como monumento.
Esta última postura está respaldada por los estudios de impacto patrimonial que se han desarrollado sobre el proyecto y que han contado con la colaboración de expertos locales y extranjeros.
El impacto visual no está definido objetivamente en la Convención del Patrimonio Mundial ni en sus Directrices Operativas, de manera que este tipo de diálogo tiende a basarse en premisas subjetivas. De hecho, en marzo de este año se celebró una reunión de expertos de Unesco en India, donde concluyeron que es necesario profundizar en la definición del concepto integridad visual antes de que pueda convertirse en un criterio de evaluación objetiva de los impactos visuales.
Para llegar a un consenso sobre la relación del proyecto con el sitio histórico, los expertos de la Unesco decidieron ceñirse a los atributos de valor universal excepcional que justificaron la inscripción como Patrimonio Mundial. Estos atributos son la traza urbana y el loteo, las fortificaciones, 17 edificios sobresalientes (catedral, Museo del Canal, Presidencia, etcétera), las viviendas y el Salón Bolívar.
"La Cinta Costera no está vinculada con ninguno de los atributos definidos en 1995 por el Estado Parte y aceptados en la inscripción", asegura el arquitecto Eduardo Tejeira, quien participó en la comisión que redactó el expediente original para la inscripción del Casco Antiguo en la lista de Patrimonio Mundial, lo que se logró en 1997. Hoy forma parte del equipo de especialistas que desarrolló un estudio de impacto del proyecto Cinta Costera sobre los atributos de valor universal del sitio histórico.
La principal conclusión de la reunión de la Unesco fue solicitar a Panamá que convoque una comisión de alto nivel para estudiar los límites de una zona de amortiguamiento del Conjunto Monumental Casco Antiguo-Panamá Viejo y hacer una revisión de los atributos de valor universal excepcional.
"Cuando se redactó el expediente original, en 1995, tanto los criterios de valoración como la descripción de los atributos no se formularon con el grado de detalle que se discute hoy día, especialmente frente a los retos del desarrollo, por lo que las modificaciones representan una oportunidad para establecer con mayor claridad el alcance de la conservación y la relación con el entorno", explica Tejeira.
Las autoridades panameñas del INAC, que asistieron a la reunión acompañadas por técnicos y asesores sobre temas patrimoniales y sobre el proyecto Cinta Costera, aseguran que la comisión de alto nivel será invitada a Panamá en un breve plazo. La propuesta de modificación de los atributos será evaluada en la reunión anual de 2015, aunque ya no existe el riesgo de incluir el sitio en la Lista de Patrimonio en Peligro por la obra de la Cinta Costera.